La Mente: Tu Aliada o Tu Enemiga

La mente es un recurso poderoso que todos poseemos y que puede ser tanto nuestro mayor aliado como nuestro peor enemigo. Comprender cómo funciona es fundamental para mejorar nuestra relación con nosotros mismos y nuestro entorno. En este artículo exploraremos la mente, sus capacidades, cómo se desarrollan nuestras creencias y cómo podemos aprender a liberarnos de patrones limitantes que se ocultan en el inconsciente.

¿Qué es la mente? A menudo, pensamos que la mente es solo nuestro cerebro, pero es mucho más. La mente reúne nuestras capacidades de percepción, pensamiento, memoria, imaginación, y más, permitiéndonos interpretar el mundo y adaptarnos a él. Pero no se limita al cerebro; como el neurólogo John Eccles decía, la mente parece pertenecer a una realidad más profunda, no solo física.

Este concepto sugiere que la mente va más allá de lo que podemos medir o ver en términos puramente materiales. Aunque el cerebro actúa como el órgano responsable de los procesos neuronales y las funciones cognitivas, Eccles propuso que existe una dimensión no material que dirige o influye en estos procesos. Según esta visión, la mente, o el “yo” consciente, reside en un plano que no se limita al funcionamiento biológico del cerebro, sino que conecta con una esencia más profunda, que algunos llaman espíritu o conciencia pura. Este enfoque apunta a que nuestros pensamientos, percepciones y creencias no son solo productos de la actividad cerebral, sino manifestaciones de una realidad interna más rica y compleja que trasciende lo puramente físico.

La Red Neuronal: Construyendo Conexiones

Cada vez que aprendemos algo nuevo o reforzamos una creencia, estamos fortaleciendo redes neuronales. Desde los primeros meses de vida, estas conexiones se van formando y solidificando. Por ejemplo, un niño aprende a mantener su cabeza erguida, luego su espalda, y así construye las bases para caminar. Esta progresión es similar a cómo se desarrollan nuestras creencias y pensamientos a lo largo de los años.

Pero aquí hay algo importante: no solo aprendemos habilidades; también absorbemos creencias y patrones emocionales. Imaginemos un niño que crece en un entorno donde recibe críticas constantes; esto crea en él una red neuronal de creencias sobre sí mismo. A medida que crece, estas ideas lo limitan, afectando su autoestima y comportamiento. Sin saberlo, su mente lo condiciona a responder al mundo desde la inseguridad y el miedo.

El Inconsciente: Guardián de Nuestras Sombras

Nuestro inconsciente almacena esos miedos y deseos reprimidos, aquellos que nuestra mente consciente evita. Esto influye profundamente en cómo vemos el mundo y nos percibimos a nosotros mismos. Aquí es donde la Programación Neurolingüística (PNL) cobra relevancia. Según la PNL, nuestra mente filtra la realidad a través de omisiones, distorsiones y generalizaciones. Es decir, actuamos según el "mapa mental" que construimos, no en base a la realidad objetiva.

Desenmascarando al Ego

Este mapa mental que construimos está lleno de creencias limitantes y condicionamientos que conforman nuestro ego. El ego no es más que esa imagen de nosotros mismos que hemos construido, pero que a menudo nos aleja de nuestra esencia verdadera. La PNL clasifica los niveles de desarrollo de nuestra personalidad, desde nuestras reacciones inmediatas hasta el propósito más profundo de nuestra existencia. Reconocer estos niveles puede ayudarnos a encontrar paz y armonía, actuando desde nuestra autenticidad.

¿Te has preguntado alguna vez por qué es tan difícil vivir en paz con uno mismo? Nuestro inconsciente, lleno de experiencias pasadas y emociones no resueltas, actúa como un filtro que influye en nuestras percepciones y reacciones, a menudo sin que nos demos cuenta. Las creencias y patrones que absorbimos desde temprana edad se almacenan en nuestro inconsciente y emergen como respuestas automáticas ante diferentes situaciones, limitando nuestras acciones y decisiones.

Estos patrones pueden llevarnos a recrear ciclos de sufrimiento, ya que nuestra mente inconsciente se aferra a estos “mapas mentales” como una forma de autoprotección, aunque en realidad nos impidan crecer y nos mantengan atrapados en el dolor.

Cada patrón psicológico en nosotros es un ego y estos actúan en nosotros como entes capaces de ir en contra de su propio creador con tal de satisfacer sus propios deseos y necesidades.

Trabajando con el Inconsciente: Un Camino hacia la Libertad

Carl Jung, padre de la psicología analítica, decía que "nadie se ilumina fantaseando figuras de luz, sino haciendo consciente su oscuridad". Esto significa enfrentar nuestras sombras y reconstruirnos desde adentro, comprendiendo que la paz y el propósito no se encuentran fuera, sino en nuestro ser interior. Ésto nos lo dijo también el Maestro Jesús: "el que no nace de nuevo no puede ver el reino de Dios", esto hace alusión a una transformación interna que nos lleva a expresar nuestra chispa divina.

Este proceso introspectivo puede ser desafiante, incluso doloroso, pero nos permite liberarnos del ego limitante y vivir desde nuestra esencia verdadera. No necesitamos esperar a que el mundo cambie para encontrar paz; debemos ser nosotros quienes demos el primer paso.

¿Listo para comenzar este viaje hacia tu interior? En este blog, continuaremos explorando herramientas y estrategias para que puedas profundizar en este proceso. Comparte este artículo, y acompáñame en esta travesía de autodescubrimiento y crecimiento.

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Susana Mera

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